Historia:
Esta ciudad tiene su origen en las minas de plata que hay en sus cercanías. La explosión económica del siglo XIII dio gran relevancia a esta ciudad que llegó a competir con Praga en poder económico, cultural y político hasta bien entrado el siglo XVI. (...) En 1420 el emperador Segismundo estableció en la ciudad la base militar desde donde atacar a los Taboritas durante las guerras husitas (...) conociendo entonces la ciudad otro periodo de esplendor económico.(...) A lo largo del siglo XVI distintos hechos dieron lugar al comienzo del declive de la ciudad.(...) La Guerra de los Treinta Años y varias epidemias de peste hicieron que la ciudad perdiese definitivamente toda la importancia que había tenido en el pasado.
(wikipedia)
El pueblo en si no es muy diferente de la mayoría de puebles del norte de la Bohemia checa, pero no por ello esta carente de encanto. Las calles empedradas rodeadas de casitas todas más o menos de la misma altura, una iglesia por aquí, una plaza por allá.. además tiene por ahí una montañita, un valle con unos viñedos, un par de restaurantes tradicionles, etc.. muy entrañable todo.
A parte de esto el pueblo cuenta con un par de atractivos turísticos bastante importantes que justifican por si solos el desplazarse hasta allí: la mencionada capilla de los huesos y la Iglesia de Santa Bárbara.
La espectacular Iglesia de Santa Bárbara se sitúa a los pies de una colina, y más que una iglesia parece una señora Catedral. Su situación privilegiada más su impresionante tamaño y estructura le confieren una elegancia única.
Y justo a su lado se encuentra una especie de clon a medias del puente de carlos que en vez de ser un puente es un balcón/pasarela.. extraño, si, pero por alguna razón allí queda la mar de bien...
Y ya solo queda "la capilla de los huesos". Por lo visto a un monje medio ciego se le cruzaron los cables y empezó a crear pirámides de huesos con los cadáveres de los numerosos muertos de la época (guerras, pestes, esas cosas). Hizo 6 y además de gran tamaño, y las guardó en la susodicha capilla. Años más tarde, la familia propietaria de la iglesia y la capilla, no menos cachondos ellos, decidieron desmontar 2 de esas pirámides y usar los huesos humanos para decorar todo el recinto, e incluso recrear el escudo familiar con ellos... El resultado final no deja indiferente a nadie: